“Cuando una madre se muere” II (Otra manera de adiós)

17.05.2025

No es que tu madre se va.
Es una raíz que se arranca del centro de la tierra.
Es perder el idioma en el que el alma aprendió a hablar.
Cuando una madre se muere, no importa cuántos años tengas: algo en vos se vuelve huérfano para siempre.
Te sorprendés buscándola en cosas que nunca miraste antes: en el olor del pan, en el doblez de una sábana, en la forma en que alguien pronuncia tu nombre.

Nadie te prepara para ese adiós.
No hay ensayo posible para una pérdida así.
Porque con ella se va también una parte tuya que solo existía en su mirada.

Pero después… con el tiempo, algo empieza a volver.
Un susurro cuando necesitás calma.
Una certeza cuando dudás.
Una fuerza tuya que sabés que es de ella.

Porque cuando una madre se muere, no se va del todo.
Se queda en vos,
pero de otra manera.

(Pronto este será uno de los episodios del podcast "Lo que aprendí del adiós", gestado desde "Qué Tupé, Relatos de Medianoche" buscando ser parido).